Hacía bastante tiempo que quería hacerme un beauty dish casero para los flash de mano. Una de las premisas del strobist es que el equipo tiene que ser barato y funcional, y aquí están los pasos para conseguir un beauty dish que da unos resultados muy muy dignos.
Lo primero es hacernos con una lámpara de Ikea, yo he usado esta que creo que tiene las medidas correctas para no pasarnos ni quedarnos cortos: Lámpara FOTO 38cm.
También necesitaremos: Dremel o similar con algunos discos de recambio, gafas de protección, nuestro flash de mano para hacer el hueco a medida, rotulador para marcar la linea por donde cortaremos, cinta americana y un rato libre.
Cogemos el flash y lo colocamos como se ve en la imagen para tomar la medida de la cabeza y hacer el corte lo más ajustado posible, esto nos ahorrara tener que poner soportes para el flash.
Cortamos con paciencia por la línea que hemos dibujado y limamos los bordes para evitar cortes en un futuro. Además lo protegeremos con cinta americana. Esto hará que no se estropee la carcasa de nuestro flash y además que se ajuste bien. En el flash colocaremos algo de velcro (parte suave) esto nos ayudara a que encaje mejor y haga un poco de presión para que no se caiga.
El último paso será colocar un reflector en el interior. En mi caso tuve suerte y sobraba alguno por la escuela. Se puede usar una tapa de fiambrera, espejo redondo de moto, incluso cartulina blanca o goma eva. Lo importante es separarlo unos 7-8 cm del flash para que rebote la luz en el interior blanco de la lámpara.
Y para que veáis el resultado os dejo una foto que realizamos con el beauty dish de Ikea en el último Taller de strobist que impartí en la Escuela de Fotografía APERTURA.
MODELO: Elva Vega
MAQUILLAJE: Noelia Fuentes
